Martes 29 de Diciembre de 2009
Sin el agobio de la rutina, un empresario o un simple trabajador pueden atender los asuntos laborales durante el período de descanso.
Una o dos horas a la mañana o el mismo tiempo pero al cerrar la jornada. Una y otra son las posibilidades que puede tener un empresario o un ejecutivo que sale de vacaciones para no desconectarse del todo con su actividad. Claro que para que eso sea posible, tendrá que conciliar el tiempo que le dedicará a las obligaciones laborales con la familia, plantean dos especialistas consultados por LA GACETA. Con la notebook o con el celular prendido cada día del veraneo significará una conexión a la tierra de la rutina o de las obligaciones cotidianas, de esas que generan estrés a lo largo de un año.
"Cuando no se puede prescindir totalmente de las cuestiones vinculadas con el trabajo, la persona tendrá que proponerse un tiempo y recrear un momento para cosas puntuales", señala Gloria Cassano, directora de la consultora que lleva su nombre y apellido.
La experta sostiene que un buen momento para es "cable al trabajo" puede ser a la primera hora de la jornada, entre las 9 y las 11, o al momento de cerrarse el día. "Es cuando los chicos se relajan y hay cierta tranquilidad para atender asuntos laborales, sin herir susceptibilidades familiares", considera Cassano.
La clave para llevar algo de trabajo a las playas, las montañas o simplemente la casa particular, sin la contaminación propia de la rutina diaria, pasa por la administración del tiempo. "Uno debe tratar de darle ciertas prioridades a los problemas. En este sentido, hay que aguzar la capacidad para discernir, por caso, qué llamado o qué mail que sí se debe responder porque comprometen algún proyecto de otros temas que pueden esperar nuestro regreso a la oficina", puntualiza la consultora.
Nadie puede hacer un "clic definitivo" a las obligaciones laborales, afirma José María Blunda, experto en Gestión de Recursos Humanos (www.joseblunda.com.ar).
No obstante, el experto considera que durante las vacaciones un trabajador o un ejecutivo pueden cambiarle el enfoque a su actividad o a su área de trabajo. "El período de descanso puede contribuir más a pensar en nuevas ideas para agregarle valor a la profesión más que para resolver problemas de urgencia que se nos presentan todos los días", acota. Eso, según Blunda, se llama construir el futuro o una carrera dentro de la organización.
Las vacaciones también constituyen una oportunidad para la búsqueda de trabajo. Según distintos estudios realizados por prestigiosas universidades estadounidenses, un escaso grupo de personas piensa en una estrategia de inserción laboral durante el verano. "Existe un preconcepto según el cual existen pocas probabilidades de conseguir un puesto durante un período de receso generalizado en las empresas", apunta Blunda. Y agrega: "si bien es cierto que la demanda de empleados desaparece de los clasificados y de las vidrieras de los negocios durante el verano, siempre hay canales abiertos de selección de personal. Internet ha acercado las oportunidades laborales".
"Cuando no se puede prescindir totalmente de las cuestiones vinculadas con el trabajo, la persona tendrá que proponerse un tiempo y recrear un momento para cosas puntuales", señala Gloria Cassano, directora de la consultora que lleva su nombre y apellido.
La experta sostiene que un buen momento para es "cable al trabajo" puede ser a la primera hora de la jornada, entre las 9 y las 11, o al momento de cerrarse el día. "Es cuando los chicos se relajan y hay cierta tranquilidad para atender asuntos laborales, sin herir susceptibilidades familiares", considera Cassano.
La clave para llevar algo de trabajo a las playas, las montañas o simplemente la casa particular, sin la contaminación propia de la rutina diaria, pasa por la administración del tiempo. "Uno debe tratar de darle ciertas prioridades a los problemas. En este sentido, hay que aguzar la capacidad para discernir, por caso, qué llamado o qué mail que sí se debe responder porque comprometen algún proyecto de otros temas que pueden esperar nuestro regreso a la oficina", puntualiza la consultora.
Nadie puede hacer un "clic definitivo" a las obligaciones laborales, afirma José María Blunda, experto en Gestión de Recursos Humanos (www.joseblunda.com.ar).
No obstante, el experto considera que durante las vacaciones un trabajador o un ejecutivo pueden cambiarle el enfoque a su actividad o a su área de trabajo. "El período de descanso puede contribuir más a pensar en nuevas ideas para agregarle valor a la profesión más que para resolver problemas de urgencia que se nos presentan todos los días", acota. Eso, según Blunda, se llama construir el futuro o una carrera dentro de la organización.
Las vacaciones también constituyen una oportunidad para la búsqueda de trabajo. Según distintos estudios realizados por prestigiosas universidades estadounidenses, un escaso grupo de personas piensa en una estrategia de inserción laboral durante el verano. "Existe un preconcepto según el cual existen pocas probabilidades de conseguir un puesto durante un período de receso generalizado en las empresas", apunta Blunda. Y agrega: "si bien es cierto que la demanda de empleados desaparece de los clasificados y de las vidrieras de los negocios durante el verano, siempre hay canales abiertos de selección de personal. Internet ha acercado las oportunidades laborales".
http://www.lagaceta.com.ar/nota/358654/Econom%C3%ADa/Sepa_como_administrar_su_tiempo_durante_vacaciones.html
No hay comentarios:
Los comentarios nuevos no están permitidos.