Noticia enviada por Noelia Alcon Iglesias
ABC Esther Casademont, experta en selección de personal
Lunes, 24-11-08/ANETE ASARE
BARCELONA. El éxito de las compañías hoy en día se mide en la capacidad y talento de su gente. Los ojos, el cerebro y la columna de las organizaciones. En los momentos críticos que la crisis provoca en la empresa, la selección de la persona adecuada para la gestión de la organización es crucial. En esta situación, escoger el líder más capacitado, el director general más sabio, el consejero delegado más apropiado puede ser una cuestión de vida o muerte, ya que tomar la decisión errónea tendrá un efecto devastador sobre el futuro de la empresa. Acertar en la elección es el papel de los «headhunters» o «cazatalentos», que gestionan el activo más valioso de las compañías.
«Equivocarse de perfil o de profesional en un ciclo positivo de trabajo es complicado, pero en un ciclo negativo el impacto es salvaje, no sólo económico, sino también en el plano motivacional», asegura Esther Casademont, presidenta de la Asociación Española de Empresas de Búsqueda y Selección de Personal (BYS) y directora de la empresa de recursos humanos, Hunivers. En su opinión, en una situación «de tensión emocional, económica, profesional y laboral», ningún avance tecnológico puede sustituir a las personas claves para la organización. «Hay que hacer cosas distintas a las que hemos estado haciendo durante mucho tiempo y para esto se necesita actitudes, valores y comportamientos» que pueden aportar solamente las personas.
La «liquidez» humana
Al igual que las entidades financieras inyectan dinero en las organizaciones cuando la crisis no deja más remedio, los profesionales del sector de los recursos humanos tienen la capacidad de aportar otro tipo de liquidez: el personal clave para salvaguardar la marcha de la empresa.
Sin embargo, los recursos humanos, un sector que ha proliferado mucho en los últimos años en España, se encuentran entre la falta de formación y la devaluación de la profesión, según Casademont. Muchas empresas, sobre todo las pequeñas y medianas (pymes), un tipo de organización muy integrado en España, siguen viendo los servicios de las empresas de recursos humanos como un lujo, del que pueden prescindir para ahorrar en los gastos. «La empresa pequeña tiene el convencimiento absurdo de que si lo hacen ellos mismos sale más barato. Sin embargo, está claro que si se encargan ellos y se equivocan en lo que tienen que hacer, al final sale mucho más caro».
Externalización, la palabra clave
La crisis obliga a alcanzar mejores resultados en menos tiempo y con menos recursos, por lo tanto es fundamental la externalización de todo lo que no sea el «core business» (el negocio fundacional). Para que la empresa pueda dedicar todo el esfuerzo en aumentar la eficiencia «en sus procedimientos, en su comercialización, en su producción y en la motivación de su gente» y asegurar su existencia y beneficios en el futuro, «todo lo contratable hay que buscarlo fuera». En Europa, es una tendencia en auge, ya que el 70% de las funciones de los recursos humanos se externalizan.
Según la presidenta de BYS, el departamento de los recursos humanos tiene que trabajar en el apoyo a los mandos de la organización, con los clientes internos y en la motivación de los empleados «para que rindan más y mejor». «Que los departamentos de personal aporten valores, costumbres y hábitos, que ayuden al «headhunter» a definir la cultura, el perfil de la organización, pero es absurdo que la empresa se queme la agenda en la búsqueda y selección del personal».
Aunque Casademont afirma que el sector de recursos humanos también padece la crisis -este año el mercado va a caer de un 10 a un 15%-, ya que las compañías contratan mucho menos, el trabajo principal será en la recolocación de «las masas de trabajadores que las grandes empresas arrojan al mercado». «Lo que hacen las compañías es optimizar los puestos de trabajo: de cuatro, cinco o seis puestos de trabajo se crea otra vacante con otro perfil, más competencias, con más idiomas, más capacidades, más adaptabilidad». Precisamente este hecho convierte la crisis en una oportunidad, un incentivo que urge a la empresa a mejorar su funcionamiento, considera la presidenta de BYS.
«Hay que tocar fondo para volver a despegar más fuerte.Igual que los niños crecen cuando tienen fiebre, una crisis ayuda a reforzar la empresa», recalca Casademont. La crisis obliga a salir de la dinámica habitual. «Es como la crisis de pareja o de familia, que va muy bien para poner las cosas en su sitio».
Además, «no se puede mejorar la cualificación de los recursos humanos de una compañía si no se da salida a aquellos profesionales que ya no aportan valor». La crisis es la oportunidad de entrada en las organizaciones a a nuevos profesionales con «nuevos perfiles, nuevos talentos y nuevas visiones». Así la compañía crece.
http://www.abc.es/20081124/catalunya-catalunya/tiempos-crisis-mejor-recurso-20081124.html
Comentario realizado por Patricia Diez Saralegui
ResponderEliminarLos recursos humanos, son considerados, aunque muchos piensen que son un coste, como el éxito de las compañías hoy en día, como un recurso clave para las organizaciones, son un activo importantísimo y un recurso estratégico. Son “los ojos, el cerebro, y la columna de las obligaciones”.
En lo referente a la selección de una persona para desarrollar un puesto de trabajo, es crucial para la propia organización, elegir al más apropiado o capacitado, ya que de no ser así, el efecto sobre la empresa podría ser devastador. Esta, es la misión de los head-hunters, que gestionan este activo vital para la empresa, pese a que cada vez más, y como consecuencia de los avances tecnológicos, de las nuevas tecnologías, están siendo sustituidos por máquinas. Sin embargo y como dice Esther Casademont, “ningún avance tecnológico puede sustituir a las personas claves para la organización”, puesto que las actitudes, valores y comportamientos, solo los pueden aportar las personas y no una maquina o cualquier tecnología.
Los recursos humanos, se encuentran entre la falta de formación y la devaluación de la profesión, a pesar de que hayan experimentado importantes avances en los últimos años. Parece que las empresas comienzan ya, a darse cuenta de que lo verdaderamente importante no es solo obtener beneficios, y no que es en sus trabajadores donde realmente está el futuro.
Las pequeñas y medianas empresas, es el tipo de empresa que predomina en nuestro país. Estas pese a que conocen la importancia de los recursos humanos, ven estos servicios de estas empresas como un lujo, como un gasto bastante considerable del que se puede prescindir consiguiendo así ahorrar más, y piensan que, si son ellas mismas las que se encargan de esta cuestión tan fundamental, conseguirán evitar este gasto o por lo menos hacerlo bastante más barato. Esta concepción de considerar al personal como un coste, hace que todas las técnicas de valoración de los puestos, medición del trabajo, política retributiva, entre otras, estén orientadas a la minimización de este coste a corto plazo.
Es cierto que probablemente consigan disminuir estos costes considerablemente, ya que los recursos humanos suponen gastos, pero es también cierto que probablemente se equivoquen y que como consecuencia de este error, “la gracia les salga mucho más cara”
Por todo esto hay que dejar de pensar que se puede ahorrar algo y dejar a los auténticos profesionales en la materia que se encarguen de ello, para lo cual se recurre normalmente a la externalización, es decir “buscando de fuera todo lo controlable”. Los recursos humanos son un sector bastante vulnerable al igual que el turismo, sobre todo en lo que se refiere al aspecto económico. En momentos de crisis como en los que nos encontramos, las empresas no contratan a tantos trabajadores, por lo que los recursos humanos no tienen donde actuar, es decir que también se resienten, entran en crisis.
En resumen de todo lo anterior, los recursos humanos son un elemento vital para cualquier organización que se precie. Sin embargo observamos una clara contradicción en este aspecto: es cierto que hay muchas empresas qque lo consideran como su recurso mas importante pero también es cierto que hay muchas empresas que en una época de crisis, lo primero que hacen, las primeras medidas que toman para disminuir costes, es reducir plantilla. Por tanto, si es tu recurso más importante, él capital más esencial, ¿por qué lo reduces en una mala situación?
Es necesario romper con el concepto tradicional de trabajo, y centrarnos más en una concepción más renovada, en la que las futuras organizaciones se crearán en torno a las personas.
Comentario realizado por Sara Cordón Mesa
ResponderEliminarCreo al igual que se comenta en la noticia es fundamental saber elegir al personal de una empresa, ya que de estos dependerá luego el resultado de la misma en sus procesos.
Por otro lado también se puede dar la situación de no elegir a personas que hubieran sido más eficaces que otros que hayan sido elegidos, los cuales no dan el resultado esperado, y se puede dar el caso de personas que aunque los hayan elegido bien no se les motive lo suficiente como para que rindan.
En cualquiera de los casos no podemos quitarle importancia a los responsables de Recursos Humanos.
Comentario realizado por Caridad Jimenez Carmona
ResponderEliminarLa internacionalización de la cultura y las relaciones entre los distintos países contribuyen a que la naturaleza del trabajo sea ahora distinta, y muchas organizaciones consideran que su gestión de los RRHH puede convertirse en un factor determinante para su posicionamiento respecto a la competencia. Por lo que la gestión de los RRHH goza actualmente de una consideración privilegiada. Este hecho principalmente se da en las grandes empresas, que suelen tener su departamento de RRHH, sin embargo en PYMES no es considerado con la misma importancia, solicitando el servicio fuera de la empresa o prescindiendo de este departamento.
Un alto porcentaje de los problemas serios que afectan a las organizaciones se refieren al factor humano.
El factor humano, hombre y mujer, son los actores principales en la empresa.
Antaño los empleados eran considerados como un elemento fácilmente sustituible (no contaba con apenas formación), desde los años 80, se ha vivido un cambio en esta concepción inicial. Actualmente los trabajadores son el principal bien o activo de su empresa.
Se ha producido un aumento importante del nivel educativo de la población activa exigido por las organizaciones. Esta población es perseguida por los “cazatalentos” de las empresas, lo que significa que actualmente los empleados una vez cursados sus estudios reglamentarios deben seguir formándose continuamente porque de lo contrario se quedarían anquilosados en el mercado laboral.
Por otro lado el cambio que desde años se está produciendo en las empresas (aparición de las nuevas tecnologías, mejor preparación en los trabajadores, nuevos yacimientos de empleo, etc) añadido a la crisis económica en la que estamos inmersos, supone la aparición de nuevos perfiles, la emergencia de profesionales diferentes, de trabajadores creativos, de gestores de la incertidumbre, de personas libres que puedan expresarse…
Hoy por hoy, el crecimiento económico es nulo lo que genera fuertes tensiones en las empresas ya que no ofrecen seguridad en el empleo, y mucho menos promoción.
Comentario realizado por Laura Garcia-Jundo Gonzalez
ResponderEliminarComo bien dice el texto, en tiempos de crisis no hay mejor recurso del que valerse para sobrellevar la situación que apoyándose en los recursos humanos de la empresa o del mercado. Pero claro, en época de crisis no todas las empresas pueden permitirse un error de cualquier trabajador ya que éste puede afectar a todo el conjunto, y en esta situación las empresas no son capaces de hacer frente a problemas graves que requieran una inversión económica, temporal o de recursos. Por ello hay que llevar un excelente gestión de los recursos humanos, ya que son el factor primordial en cualquier organización. Estando la crisis presente, las empresas empiezan a recortar gastos, algunas, en las que la idea de la gran importancia del factor humano no está muy presente, comienzan a despedir o modificar la plantilla, siendo ésto totalmente perjudicial para la empresa. Son empresas en las que el personal juega un papel secundario estando por encima los ingresos o la imagen ofrecida de cara al mercado. Apoyando la opinión de la presidenta de BYS, creo que en época de crisis, es necesario llenar de nuevas caras la plantilla, siempre y cuando se cuente con la ayuda de especialistas en la sección de gestión de los recursos humanos. Ésto puede ofrecer a la empresa nuevos enfoques, ideas o actitudes para hacer frente a la etapa en la que se encuentre inmersa la organización. También apoyo la externalización de la gestión del factor humano hacia otras empresas, ya que creo que ésto permite a la empresa una atención específica en su actividad y, a la vez, asegura un buen resultado de sus trabajadores.
Comentario realizado por Ana I. Lopez Marmesat
ResponderEliminarEste artículo vuelve a insistir en la importancia del recurso humano. Estoy totalmente de acuerdo pero sigo pensando que las empresas aún no han asimilado este concepto. Creo que tanta importancia tiene la formación continua de los trabajadores como la formación de los directivos. Existen muchas empresas con un sistema de gestión anticuado, que no quieren avanzar o no saben como hacerlo o desconocen la importancia de este cambio el sistema. Se empeñan en seguir concibiendo al trabajador como un elemento más sustituible en cualquier momento y que además le supone un coste elevado. Los directivos son los primeros que deben esforzarse en enteder esto, creo que la concepción renovada de los recursos humanos aún no ha llegado a muchas empresas en España y menos aún en Andalucía. Además en estos tiempos aún resulta más difícil un cambio cuando ahora en la mayoria de las empresas los números no cuadran. Este es un periodo difícil, un periodo muy instable donde desde luego el trabajador no es la principal preocupación pero si es el primero en sufrir las consecuencias. Quien tenga la suerte de trabajar en una empresa con este tipo de gestión llamémosle “moderna”, donde se encuentre protegido y no sienta que su estabilidad puede peligrar puede sentirse “AFORTUNADO”.