domingo, 23 de noviembre de 2008

Empleados ineptos: ¿También están presentes en su empresa?

Noticia enviada por Blanca Pompa Pérez



Sí, así es, sin duda alguna, así como existen Gerentes Ineptos también pululan en las empresas los Empleados Ineptos y resultan incluso más comunes que los anteriores y son más desconcertantes las razones por las cuales aún se encuentran activos en las nóminas de las organizaciones.

Los empleados ineptos no son otra cosa que aquellos individuos, sin importar su lugar en la empresa, que no sólo hacen su trabajo a medias con resultados de dudosa calidad, sino que atrasan o entorpecen el ejercicio profesional de los demás.

Todos saben quienes son, pues son fáciles de identificar, ellos tienden a mostrar dos facetas inconfundibles: la primera de ellas es que se muestran al extremo ocupados, con escritorios repletos de papeles, notas, documentos y cuanta cosa que sugiera trabajo pendiente, aunado a expresiones que manifiestan la falta de tiempo y el exceso de cosas por hacer o se encuentran involucrados en cuanto proyecto aparece, reuniones, visitas o actividades que lo alejan de las instalaciones de la empresa y que resultan la excusa perfecta para no terminar a tiempo sus asignaciones.

Por supuesto que existen variaciones y combinaciones diversas e interesantes que amplían de manera considerable las características propias de quienes pueden ser tildados como empleados ineptos.

Ahora bien, la ineptitud a la que se hace mención se refiere directamente a la ausencia de agregación de valor a los procesos administrativos y de producción de bienes y servicios de la empresa u organización donde están presentes estos individuos y no a la capacidad o no que puedan tener ciertas personas en su ejercicio profesional.

Los empleados ineptos se las arreglan para parecer trabajadores comunes, incluso hay quienes invierten de doce a catorce horas en la faena diariamente, por lo que aquellos no los han identificado aún los tildan de incansables y ejemplares. Pero quienes que comparten con él, o ellos de manera directa, logran observar sus deficiencias, finitas o excusas sin comprender por qué las empresas lo mantienen activos.

Las razones pueden ser tan variadas como inverosímiles, y van desde la creencia, por parte de los responsables, de estar frente a una persona valiosa para la compañía hasta los vínculos sociales, familiares e incluso políticos y económicos que “alguien” tiene con ellos.

Una de las explicaciones más comunes que se han obtenido, durante el estudio que se llevó a cabo para establecer la realidad de este fenómeno, se sitúa en que “para algunas cosas este tipo de empleados resulta pertinente”; al ahondar en detalles pudo saberse que, entre ellas, sobresalen:

1. Son aduladores, no descartan participar en actividades diversas aunque al final terminen por hacer nada ellas.
2. Debido a su personalidad conocen a muchas personas, por lo que sirven de enlace.
3. Aunque son ineptos suelen poseer tal agilidad mental para ciertas situaciones que coadyuvan a observar escenarios que no se han explorado.
4. Sirven de relleno cuando el caso lo requiere debido a que pretenden conocer el negocio mejor que sus auténticos fundadores… y la más descabellada de todas:
5. Son la excusa perfecta para justificar la ausencia de mejoras, basados en que sería injusto aumentar a otros y a ellos no.

Tales afirmaciones han sido expresadas por los responsables de empresas o diferentes unidades, quienes están en perfecto conocimiento de la existencia de estos empleados en sus filas; aunque se repiten en diferentes escenarios, no significa que son características exclusivas de estos individuos; lo cierto es que resulta más incomprensible la existencia de empleados ineptos en las empresas que la de los ya mencionados gerentes ineptos.

No obstante y, para proporcionar algunos aspectos que faciliten su identificación más detallada se listará lo siguiente:

• Son muy sociales y siempre tienen algo que decir, o son callados y distantes, quejándose de la empresa constantemente o en ocasiones.
• Siempre tienen una excusa inteligente que justifica de manera momentánea sus deficiencias o incumplimientos, usualmente asociadas a actividades relacionadas con el trabajo.
• Son los primeros en ofrecerse en labores que no le competen, pero que lo acercan a personas con niveles de decisión importante.
• Parecen saber lo que hacen o dicen, pero sus frases o productos son el resultado del parafraseo de opiniones, comentarios o trabajos ajenos…. Entre otras tantas.

Cuando en el pasado artículo hablé de los Gerentes Ineptos, no faltó quien de manera inmediata identificara a quienes encajaban, sino completamente, con un buen porcentaje de similitud, en la descripción que hice… ahora resultaría interesante observar, a los que hicieron tal ejercicio, buscando concordancias nuevamente una vez leído este trabajo.



Artículo de opinión de Félix Socorro obtenido de la siguiente fuente de internet:

http://www.gestiopolis.com/organizacion-talento/manejo-de-empleados.htm

1 comentario:

  1. Comentario realizado por Estefania Montilla Martin

    Lo mismo que para acceder a una empresa se realiza un proceso de selección que consta de varias pruebas, al personal de la plantilla se le debería llevar a cabo un control de su trabajo para que en una organización no existan personajes como indica el artículo, en muchas organizaciones se realizan mediante la supervisión de un superior, pero hay otras organizaciones que no le dan importancia a estas prácticas. Lo único que consiguen restándole importancia a estos empleados ineptos es el mal funcionamiento de la organización y la marcha lenta de los objetivos marcados.
    Bajo mi punto de vista, en todos los empleos, el superior debería pedir a sus trabajadores un informe realizado semanalmente donde indiquen las tareas que han realizado, especificadas una a una. Con esta práctica se llegaría a paliar el gran número de empleados ineptos que existen actualmente en las organizaciones.

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